La clave para acompañar un buen plato: la presentación.
Una comida excelente se merece una presentación impecable. Algo que se ha impuesto en los mejores restaurantes y también en las casas de los anfitriones que les gusta recibir a sus invitados con gusto y estilo.
Cualquier plato vestido de una porcelana pintada a mano, acompañado del color perfecto de mantel, la cristalería cuyas tonalidades hacen vibrar el ambiente, los cubiertos diseñados no solo como simples utensilios sino como arte y los pequeños detalles que hacen de la mesa y de la estancia en sí un lugar idóneo para degustar una auténtico manjar de de reyes.
Las vajillas han pasado a ser un elemento importante en cualquier reunión. No son solo el lugar donde vamos a colocar el alimento, pueden ser mucho más: inspiración, sentimientos, color…
Así pues, cuando pensemos en una reunión especial, como ya decíamos en nuestro anterior post hay que prestar atención en la decoración. ¿Es lo mismo comer unas lentejas en un plato blanco, sin ningún ornamento y diseño que hacerlo en uno decorado? No, no es lo mismo. Por eso esta vez hemos recorrido el panorama nacional, para que todo sea “made in Spain”. Hemos descubierto las vajillas que mejor se ajustan a los platos Rogusa.
Nuestra recomendación en vajillas
La diseñadora de vajillas Nuria Blanco nos apasiona. Con sus diseños pintados a mano, con diferentes temáticas nos encanta para ofrecer a nuestros invitados la ternera a la jardinera. Sería una opción magnífica porque no solo estás presentando un plato sino un sentimiento.
Otra gran artista es Andrea Zurraluqui, una jerezana que comenzó a pintar por puro placer y lo ha convertido en su pasión y su forma de vida. Nos inspira y nos propone unas vajillas que combinan perfectamente con nuestras legumbres. Podrás darles un aire romántico, otoñal y sin la rigurosidad tradicional que tan acostumbrados nos tienen al presentar este tipo de platos.
Si lo que quieres es deleitar a tus invitados con un rabo de toro, las Vajillas de Ultramar te ofrecerán ese toque tradicional. Con los filos dorados que se complementa con la irregularidad de la vajilla aportando al mismo tiempo un aire rústico, haciendo que cada comensal tenga casi un menaje diferente.
Y para lograr el toque fresco, el que nos sugieren platos como nuestra tortilla o nuestro arroz, las pinceladas de Los Platos de Pan, son un auténtico acierto. Los diseños de Bárbara Pan están realizados con mimo y entusiasmo. Vajillas diferentes, donde ninguna es igual a otra y con motivos de la naturaleza que inspiran.
Los platos de carne servidos en las ideas que nos presenta Carmen Muñoz prometen brillar con luz propia. Sus vajillas pintadas a mano con motivos animales y florales son una delicia.
Y ya para terminar, si lo que buscamos es un picoteo divertido y atractivo lo podemos encontrar con ideas como las que nos presenta El taller de Piñero, no veremos tanta vajilla pero sí una gran variedad de elementos que alegrarán nuestra mesa, originales sin duda.